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Cómo convertir tu flota en una flota eléctrica 

Si te estás planteando convertir la flota de vehículos de tu empresa en una flota eléctrica, primero hay varios factores que debes tomar en cuenta antes de realizar este cambio, como pueden ser los siguientes: 

• Kilometraje diario medio: ¿Cuántos kilómetros recorren los vehículos de tu empresa diariamente? Conocer este dato te permitirá saber cuál sería el tipo de vehículo eléctrico que mejor se adapta a tus necesidades. 

   

• Autonomía necesaria: en relación con el kilometraje diario medio, es necesario que los vehículos eléctricos que conformen tu flota tengan la autonomía suficiente para cubrir diariamente las distancias que tu empresa recorre.  

   

• Consumo medio: las flotas eléctricas suponen un gran ahorro en el consumo de energía de los vehículos, de esta manera, cuánto más consumamos en los desplazamientos de nuestra empresa, más nos convendrá disponer de una flota eléctrica.  

   

• Tipología de recorridos: debes conocer el tipo de recorridos que los vehículos de tu flota realizarán: ¿serán largos viajes por carretera o cortos trayectos urbanos? Esto determinará el tipo de vehículo que más conviene a tu empresa. 

   

• Tiempo de actividad vs inactividad: antes de cambiar tu flota a eléctrica, debes tomar en consideración si los vehículos permanecerán mucho tiempo parados. Si los vehículos eléctricos pasan mucho tiempo inactivos, sus baterías sufren una pérdida de capacidad irrecuperable. 

   

• Lugar de carga: uno de los principales factores a tener en cuenta para convertir tu flota a eléctrica es tener claro dónde cargarás los vehículos. Es esencial que cuentes con un lugar de carga accesible para tu empresa, ya sea público o privado.  

   

Respondiendo a estas cuestiones, podrás hacerte una idea de qué necesidades necesitas cubrir para tu empresa. Así, podrás determinar qué tipo de vehículo será el que mejor se adapte a tu empresa, cumpliendo con todas las características que necesitas para tu flota. De esta manera, podrás descubrir si los vehículos eléctricos son los más adecuados para tu actividad empresarial.  

Si tienes más dudas sobre lo que necesitas saber para mantener tu flota eléctrica, consulta aquí. 

Ventajas de una flota eléctrica 

Más allá de la forma en que una flota eléctrica se adapta a las necesidades de tu empresa, contar con vehículos eléctricos para la flota de tu empresa te ofrece múltiples ventajas, entre las que se encuentran las siguientes: 

• Reducción de costes: uno de los mayores costes a los que están sujetos los vehículos empresariales son los gastos en combustible. Sin embargo, los vehículos eléctricos resultan tres veces más eficientes que los vehículos que utilizan combustibles tradicionales, lo que supone un gran ahorro para tu empresa.

   

• Mejora la percepción de tu negocio: gran parte de la población piensa que es responsabilidad de las propias empresas llevar a cabo medidas para preservar el medioambiente y combatir el cambio climático. De esta manera, al convertir tu flota en eléctrica, mejorarás la imagen de tu empresa al hacer que esta contribuya al cuidado del medioambiente.

   

• Alineación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible: entre estos objetivos se encuentra el “Desarrollo de Ciudades y Comunidades Sostenibles”, objetivo que pretende impulsar la movilidad segura, accesible y sostenible para todos los ciudadanos. Al cambiar a una flota eléctrica, tu empresa se alinea con este objetivo, lo que tiene un impacto positivo en la reputación de tu empresa.

   

• Reducción de la huella de carbono de tu negocio: los vehículos eléctricos tienen 0 emisiones contaminantes, lo que se traduce en una reducción de emisiones de CO2 a la atmósfera. A esto también se une la eliminación de la contaminación acústica, ya que los vehículos eléctricos no generan contaminación acústica.

   

• Impacto positivo en la salud: como bien es sabido, la contaminación afecta de forma negativa a la salud de la población. De esta manera, al convertir tu flota a eléctrica, y por tanto, reducir las emisiones generadas por tu empresa, contribuyes a mejorar la salud de la población y tus propios empleados.

   

• Facilidades de circulación y estacionamiento: cada vez más ciudades están implementando limitaciones de acceso y estacionamiento a los vehículos más contaminantes en determinadas zonas de bajas emisiones. Sin embargo, los vehículos eléctricos no están sujetos a estas limitaciones, por lo que tu flota eléctrica disfrutará de libertad en su movilidad.

   

• Prepara a tu empresa para el futuro: a partir de 2035 la venta de vehículos de gasolina, diésel o híbridos estará prohibida, permitiéndose únicamente los vehículos eléctricos de batería o de pila combustible. Si conviertes ahora tu flota a eléctrica estarás adelantándote al cambio.

   

• Acceso a beneficios fiscales y ayudas: como herramienta para fomentar la transición hacia una movilidad más sostenible, existen numerosas ayudas, como el Plan Moves III, y ventajas fiscales para aquellas empresas que utilizan una flota eléctrica.

   

    

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Si quieres convertir la flota de tu empresa en una flota eléctrica, el renting flexible de Northgate te lo pone muy fácil.

La opción del renting flexible supone para tu empresa libertad en la movilidad, con vehículos libres de compromisos de permanencia, que pueden ser devueltos en cuanto dejen de ser útiles para tu empresa, y que ser eléctricos te permitirán desplazarte por cualquier sitio, incluso aquellos con limitaciones a la circulación.

Además, con el renting flexible, tu empresa podrá actualizar los vehículos de su flota eléctrica, para disfrutar siempre de vehículos con la última tecnología, adaptados a las necesidades de su empresa y sin que esto suponga costes adicionales.

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